Ofrecemos la posibilidad de aplicar tratamientos contra la corrosión o imprimaciones especiales como acabados adicionales a la pintura líquida.

La pintura líquida es una opción excelente para acabados de calidad y uno de los procesos más habituales por su resistencia, variedad de acabados y posibilidad de aplicarse sobre superficies diversas.
En los componentes ensamblados y en ciertos productos se requiere versatilidad y estética. Podemos aplicarla en cualquier tipo de productos, sin importar el tipo de tratamiento que vaya a recibir: estructuras metálicas, rotulación, elementos para la decoración, fundición, industria alimentaria, packaging…
Sobre los colores, que podemos aplicar nos adaptamos a cualquier carta RAL, NCS o PANTONE, así el acabado podemos adaptarlo fácilmente a su color corporativo o que mejor defina su producto.
Cubrimos este servicio para piezas de cualquier tamaño siendo especialistas en piezas metálicas o de plástico, ofreciendo también la posibilidad de acabados como imprimaciones o tratamientos contra la corrosión.
Por lo tanto el mimo en el detalle es lo que marca la diferencia y a un producto por encima del resto.